Una biblioteca 2.0, más allá de ser una simple suma de incorporaciones tecnológicas, ha de estar abierta al cambio continuo, ofrecer servicios actualizados y continuamente evaluados y crecer junto al usuario. La participación e interacción con el usuario ha de ser el punto de partida de cualquier servicio, ya sea presencial o virtual.
El usuario gana poder en este nuevo concepto de biblioteca: poder de decidir qué le ofrecemos y cómo se lo ofrecemos, poder de generar, compartir y distribuir información y no únicamente de consumir; poder de decidir qué le interesa y qué no es relevante que continuemos ofreciendo, pero, a cambio, el bibliotecario puede ganar autoridad. No confundamos poder con autoridad. No es lo mismo.
En estos momentos de cambio, podemos ganar autoridad si no tenemos miedo a perder el poder y conseguimos situarnos como profesionales necesarios que orientamos, damos apoyo y generamos espacios y servicios al ritmo de las nuevas posibilidades tecnológicas y apostamos por un “nuevo” modelo de biblioteca basado en la interacción y participación del usuario. Es decir, ganaremos autoridad en la medida que seamos capaces de interrelacionarnos con los usuarios y, como consecuencia de ello, mejorar e innovar continuadamente.
2 de agosto de 2008
Roser Lozano y la biblioteca 2.0
Esta es una de las miradas de Roser Lozano, Directora de la Biblioteca Pública de Tarragona (Cataluña, España), sobre la actitud 2.0 aplicada a las bibliotecas públicas, publicada en este artículo en ThinkEPI hace unos días. Gran reflexión. No la dejen de leer.
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2 comentarios:
Estimado Enzo:
me voy a tomar la libertad de compartir esta entrada con el personal que trabaja en las bibliotecas del Bío Bío.
Muy buena.
Dale no más Ricardo, que de tomarse libertades se trata esto del trabajo colaborativo en red. Y cuéntame (cuéntanos) como te va.
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