Comparto un extracto de una entrada que acabo de publicar en elquintopoder.cl:
Entender a TVN como un canal de televisión pública, bajo los estándares que uno ve a la BBC, Televisión Española, la RAI o la Canadian Broadcasting Corporation (CBC), es crear, de antemano, expectativas irreales sobre su deber ser.
Sin embargo, TVN juega con la ambigüedad en este ámbito. Son innumerables las veces en que hemos escuchado a los presidentes de sus directorios o a sus directores ejecutivos hablar del "exitoso modelo de televisión pública de calidad y autosustentable" que TVN ha construido en estos años. Una empresa del Estado que no depende del presupuesto fiscal y que se financia con sus ingresos. Una canal de televisión que no requiere de los impuestos de nosotros pero es, finalmente, "el canal de todos los chilenos". O así, por lo menos, repite machaconamente su slogan.
Sin embargo, en esta pasada, algunos chilenos quedaron fuera. Los millones de compatriotas que no tienen suficientes recursos para contar con acceso a Internet de calidad en sus domicilios o para abonarse a DirectTV, recibieron un servicio de segunda calidad respecto a aquellos otros que tenemos acceso a una o a las dos opciones alternativas. Millones de personal que nunca vieron algunos partidos de este Mundial y otros los pudieron presenciar en diferido, horas después de ocurridos.
Y eso es segregación provocada por el Estado.
Les invito a leer la entrada completa y comentar en elquintopoder.cl.
No hay comentarios:
Publicar un comentario