1 de agosto de 2010

Y sigo matando al libro

Hace unos meses, desde la revista española Mi Biblioteca, editada por la Fundación Alonso Quijano, me invitaron a publicar una columna de opinión, la que salió en su último número (Verano 2010). Gracias al equipo de la revista por la oportunidad para mantener vivos mis instintos asesinos.

1 comentario:

Samuel Leal dijo...

Recuerdo hace muchos años, haber conocido a un señor ya mayor, cuya gran pasión en la vida era leer y coleccionar libros. Su casa estaba llena de libros en todos lados, todas las habitaciones tenían repisas llenas de libros grandes de tapas gruesa, hasta en la cocina había ejemplares.
Este señor debe haber muerto ya, menos mal, ya que su gran objeto de deseo está por morir también.
Estoy de acuerdo contigo, creo que es cuestión de tiempo, pero es algo irreversible. Para quienes somos transplantados digitales, este cambio ha sido algo traumático, pero para los nativos, es parte de su paisaje cultural.
Que muera el libro añoso, que viva la lectura digital diversa y democrática.

Saludos